Desde 1995 Genín Andrada ha realizado numerosos viajes por Latinoamérica y el Caribe, y en cada uno de ellos ha seguido los pasos de uno de los grandes conquistadores españoles: Colón, Pizarro, Hernán Cortés, y Nuñez de Balboa. Siguiendo estas rutas, el artista ha recorrido los primeros asentamientos de lo que entonces se llamo El Nuevo Mundo.

Andrada refleja en esta exposición las sensaciones que la sociedad latinoamericana le ha producido. Sus fotografías se alejan de los tópicos, principalmente del tópico del exotismo, para plasmar y recoger la energía que allí se respira. 

El artista reflexiona sobre aquello que más le ha hecho sentir en estos viajes: el mestizaje. Las mezclas raciales han sido una constante histórica para las gentes de estos lugares.

El mestizaje se manifiesta en todos los rasgos de su cultura: la cadencia con que se enfrentan a cada momento de su vida, sus creencias, sus ritos, sus colores, su sensualidad..., todo es producto del cruce, del encuentro.

Esta obra en la que Andrada se deja llevar por el fenómeno del mestizaje resulta de una enorme emoción y gran valor formal. Así ha sido reconocida por los premios París Photo y Extremadura a la Creación, y por la publicación de la misma en la revista Matador.